Salimos de Melilla a las 10,30 de la noche. Las luces de navegación de proa han dejado de funcionar, improviso unas de fortuna en el palo. Poco viento, pero el que hay en buena dirección veremos como se desarrolla el viaje. Afortunadamente el GRIB se cumple y aumenta hasta 15 nudos a un descuartelar, no bajamos de 6 nudos de velocidad, hay algo de ola, zarandea el barco pero no nos molesta demasiado.
El día amanece nublado, gris, desapacible; pero lo importante es que el viento nos propulsa a más de 6 nudos SIN MOTOR. Poco a poco el sol puede con las nubes y las capas de ropa van cayendo, después del Ángelus ya hay “despelote” general, aunque hoy nadie quiso cerveza, solo vino –por algo sería-. Algún barco de pesca (bastante moderno) se cruza con las redes al arrastre. Se divisa la costa argelina. Comemos una riquísimas lentejas estofadas que preparó Andrea. Siestas a voluntad.
El día amanece nublado, gris, desapacible; pero lo importante es que el viento nos propulsa a más de 6 nudos SIN MOTOR. Poco a poco el sol puede con las nubes y las capas de ropa van cayendo, después del Ángelus ya hay “despelote” general, aunque hoy nadie quiso cerveza, solo vino –por algo sería-. Algún barco de pesca (bastante moderno) se cruza con las redes al arrastre. Se divisa la costa argelina. Comemos una riquísimas lentejas estofadas que preparó Andrea. Siestas a voluntad.
Por la tarde saco el juego de banderas de señales para “repasar” algunas. Aprovecho para poner el nombre de BOB, que por razones obvias, se convierte en ROB.
El viento rola, enrollamos la Génova y cambiamos la mayor de banda, seguimos a 6 nudos. El atardecer es bonito, en un cielo sin nubes bajas el sol cambia sus colores. El viento cae, tenemos que poner el motor para mantener los 5 nudos.
En la primera singladura hemos hecho 140 millas, ¡ya me conformaba yo con repetir lo mismo en días sucesivos!
JOSU:
Las noches son frías y el mar está muy movidito. Así será durante todo el día. Hemos preparado un calendario/horario para el reparto de las guardias nocturnas:
Día 1: Bob, Josu, Maite, Andrea, Bob
Día 2. Andrea, Bob, Josu, Maite, Andrea
Día 3: Maite, Andrea, Bob, Josu, Maite
Día 4: Josu, Maite, Andrea, Bob, Josu
Día 2. Andrea, Bob, Josu, Maite, Andrea
Día 3: Maite, Andrea, Bob, Josu, Maite
Día 4: Josu, Maite, Andrea, Bob, Josu
También hemos organizado una apuesta sobre la fecha y hora de llegada a Tabarka:
Andrea: entre las 15 y las 17 del lunes
Maite: entre las 19 y las 21 del lunes
Marce: entre las 10 y las 12 del lunes
Josu: entre las 03 y las 05 del martes
Bob: entre las 16 y las 18 del lunes.
Maite: entre las 19 y las 21 del lunes
Marce: entre las 10 y las 12 del lunes
Josu: entre las 03 y las 05 del martes
Bob: entre las 16 y las 18 del lunes.
Las guardias son frías y se hacen un poco incómodas por el vaivén de las olas. Para pasarlas más rápido descargué en casa varios programas de “La mecánica del caracol” que lo emiten en Radio Euskadi a diario a primera hora de la tarde y que por mi horario laboral no puedo oírlo en casa. Por lo tanto, en cada guardia oigo dos entregas de este interesante programa de divulgación científica. Cada uno pasa el tiempo como quiere, o mejor dicho, como puede!!!
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