Fase B - Día 11

La noche transcurre tranquila, incluso podemos quitar el motor y navegar solo a vela a 6 nudos.

Por la mañana hay más olas y vamos algo más despacio, pero siempre por encima de los 5 nudos. La driza verde que es la de la vela de capa y de respeto, aparece rota, se ve que rozaba con algo. Habrá que comprar otra (no creo que tengo otro cabo tan largo) y pasarla con una guía por el palo, eso habrá que hacerlo en puerto.

El día pasa con sol y buen viento, tal vez demasiado… Me explico:

Por la tarde picó un atún, tiraba bastante, había que disminuir la velocidad del barco, al intentar aproarlo al viento, el bicho se quedó sin tensión y se cruzó por debajo del barco, eso motivó que el hilo se enganchara en la hélice, que aunque estaba parada se debió trabar en sus palas (lo veremos cuando podamos bucear) así que perdimos nuestra última YAMASITA ASESINA, gran parte del hilo del carrete (habrá que cambiarlo completamente) pero lo peor es que la génova al quedarse sin viento se lió el cabo del carrete y tuvimos que quitarla para poner la trinqueta. Mañana será día de reparaciones en marcha si se puede.

JOSU

Hemos entrado en el mar Jónico. Bueno, eso lo dice el gps, porque a bordo todo el mar es igual de azul. Solo se ve la línea del horizonte. Es un círculo que rodea al barco situado justo en su centro y del que apenas nos separan unos pocos kilómetros -5 ó 6-. Pero a pesar de esta pequeña distancia es inalcanzable. 

Salvo el lamentable incidente con el atún y la génova a última hora, el día ha sido tranquilo y caluroso. Aprovechamos para descansar. El anochecer es impresionante: el sol a punto de ocultarse ilumina el cielo y las nubes se tiñen de tonos rojizos que contrastan con el azul del cielo.